lunes, 12 de octubre de 2015

Ama de casa...tu abuela.


Estoy preparando la comida, en realidad mis comidas son muy sencillas, yo no hago mole de olla ni cosas elaboradas, Knorr y cualquier otro aditamento que me haga la vida sencilla es bienvenido. De repente suena mi celular, un número desconocido. Es una Head Hunter, muy interesada en mi Currículum. Me dice que tiene una oportunidad para mi, que es en una empresa Europea de Consumo Masivo para un gran puesto Global tremendísimo. La escucho mientras pico las calabazas. Al terminar le explico que yo salí del mercado y que tengo un niño pequeño en casa, y me dedico a otras cosas. Entonces ella pregunta: ah, entonces eres AMA DE CASA? (Espacio de cerebro resonando)… Se me cae el cuchillo de la mano. 

Veo mi casa y está desastrosa, hay rayones de crayola por ciertos lugares, juguetes, ropa limpia en la secadora y no me acuerdo cuánto tiempo lleva ahí. Esta semana no vino la señora Ivette, ¡¡soy un desastre sin ella!!

Jamás he sido muy hogareña que digamos, soy más bien silvestre. Las cosas sencillas, se me descose el dobladillo del pantalón? Tengo una engrapadora buenísima. La ropa que "plancho" queda más arrugada que antes de plancharla, un día quería hacerle a mi esposo un platillo con pescado que quedó tan aguado que terminó siendo algo tipo caldo de pescado, se me olvida que dejé hirviendo cosas… no se si la palabra sea floja, prefiero práctica, no se oye tan feo. Mis días pasan en pants, jeans, ropa cómoda, tenis, cola de caballo y juegos con Leo, cantamos, jugamos, bailamos… y luego tengo terapias, otras veces tengo que decorar pasteles y galletas, organizo mi agenda para escribir o tomar cursos y otras veces salgo a comer o tomar un café con las 5 amigas que me quedan y no les doy "hueva". Entonces hago memoria, yo jamás vi a mi mamá (con 3 hijas) en pijama a las 2 de la tarde, y sin irme taaan lejos, mi abuelita con 6, tenía todo bajo control. Mi casa siempre estaba ordenada, nosotras listas y peinadas estiradas, la ropa limpia, la comida sin falta todos los días… mi mamá jamás dijo: híjole ya son las 2 y no me dio tiempo de hacer de comer, vamos por un caldito de pollo al vips. Y estoy casi segura que la mayoría jamás ha visto a su abuelita en pants o con la casa tirada, o ropa sucia. 

En las empresas que trabajé, siempre hacíamos estudios para entender el segmento de AMAS DE CASA, nivel medio, entre 25-35 o 40 años. Y suponíamos en nuestras mentes ejecutivas de primer mundo que eran mujeres con delantales, que cosen la ropa, y se sienten culpables cuando no les da tiempo de hacer un menú de 5 tiempos, con su respectiva agua de frutas. Incluso hacíamos sesiones de grupo con estos seres, y llegaban mujeres perfectamente bien reclutadas, amaestradas pues, a decirnos justo lo que queríamos escuchar. Pero hoy, que voy a lugares donde hay otras mamás del calibre, o sea del target me doy cuenta que es un chiste. Las mujeres que se quedan en su casa no se sientan a tejer y ver la rosa de Guadalupe mientras la carne se ablanda y luego salen a buscar las frutas y verduras frescas para hacer guisos estilo Como Agua para Chocolate (mi libro favorito). Las mujeres de hoy no necesitan "trabajar" oficialmente en ningún lado, salen de su casa y buscan cosas que hacer. La mayoría consigue algo tipo Avon, Concord, DoTerra, Just, Andrea… dependiendo el perfil y en nivel, pero todas venden y hacen algo, toman cursos, les gusta orearse pues. Y dato para los curiosos, conocí a una mujer que tiene 3 hijos, "ama de casa" que lleva 15 años vendiendo Avon, es una señora que tiene una mafia como de 30 amigas abajo vendiendo. La mujer se mete entre 30 y 50 mil pesos mensuales. La próxima vez que juzgues a alguien que se dedica a eso, ten cuidado de ganar más de eso para al menos estar parejos, ah y ella no se mete las chingas que tu si, querido Godinez. 

Afuera, hay un mercado invisible, un "target" que nadie ha sabido atacar con NADA. Un segmento con el que me identifico más. Las mujeres mal etiquetadas AMAS DE CASA que en realidad lo último que hacen es estar pendientes de la casa, que tienen quien haga eso por ellas, y que están buscando ingresos siendo Wedding Planners, certificándose como maestras de Yoga, tomando clases de lo que sea, ayudando en lugares donde rescatan perros, dando clases a sus hijos y sus amigos de lo que sea, que venden pasteles, comida, que diseñan, hacen reiki, dan masajes, algunas se animan y ponen un SPA con amigas, o hacen una red bien diseñada de venta de aromaterapia que les deja para sus gustitos (ya saben, bolsitas Louis Vuitton y zapatos Jimmy Choo, de perdis), poniendo un negocio de consultoría, un negocio de empleadas domésticas… que no aparecen en el mapa, y que están moviendo una economía muy interesante. 

Después de pensar en esto, respondo a la mujer: pues, ama de casa no precisamente, doy terapias y … y ella hace un ruido raro con la boca que yo traduje como "pobrecita" así que me quedo callada y me limito a decir: entonces no estoy interesada en volver. A lo que ella dice: en algún momento piensas retomar tu VIDA? y ahí es donde se une la fuerza de lo Echandi y lo Hernández y respondo: jamás había sentido mi vida tan plena y en control. No se si exista una etiqueta para lo que yo hago, pero es un hecho que no soy ama de casa, porque deberías venir a ver mi casa… ama de casa, tu abuela. 

Ser ama de casa implica un nivel de organización, control y supervisión extremo, debe ser un honor y mis respetos, pero yo, pues no precisamente. 

Y cuelgo. Me están pidiendo dos consultas extras para esta semana, un pastel adicional y necesito echarle las calabazas al consomé, si es que se le puede llamar así al menjurge que acabo de preparar.